Villa Emma es un barrio ubicado en la localidad de Bosa Occidental y la mayoría de sus habitantes son: recicladores, desplazados por la violencia y madres cabezas de familia. Esta diversidad ha generado en el barrio una segregación de los grupos, impidiendo la debida unidad y reconocimiento de los actores del barrio. Además de que ha imposibilitado la participación de estas familias en las actividades de la comunidad. Por otra parte, se encuentra que existe un rechazo hacia las personas que realizan la labor del reciclaje, debido a que no se reconoce su labor y se desconoce su estilo de vida.
Estas familias viven en condiciones de pobreza extrema, sus hogares tienen problemas de aseo, cuentan con poco espacio para vivir, sobre existen los días con un acceso mínimo de dinero, la mayoría de los integrantes de estas familias padecen enfermedades mentales o de alto riesgo, entre otras condiciones. Pero a pesar de la situación que viven, se determinó que estas familias tienen ritos asociados a la comida que representan una importancia y valor indiscutible en cada uno de sus integrantes, de tal forma que es primordial para ellos cuidar y proteger los espacios de convivencia que se dan a la hora de compartir el alimento.
Además de lo anterior, se encontró que por encima de los limitantes que tienen algunos de los integrantes de la familia para poder escribir o leer, la actividad de dibujar es una habilidad que todos pueden desarrollar y que además es reconocida por la familia como un mecanismo de expresión de sus sentimientos, situaciones y pensamientos.